PINK - EL GATOPARDO – LOCKERBIE (De Película RNE 15/03/2025)

 


 

Cosas que anoche le conté a Yolanda Flores.

 

Cavilando. Se han descubierto en Atapuerca los huesos de un fragmento de cara de un homínido anterior en algunos cientos de miles de años al Homo Antecesor. Al dueño de los huesitos le han llamado Pink porque a los antropólogos ese enigmático trozo de rostro les ha hecho en pensar en el disco “La cara oscura de la Luna”, de Pink Floyd. Y una cosa lleva a la otra. Psicodelia y  Pleistoceno: buena parejita.

 

EL GATOPARDO:

Netflix ha producido para  la televisión la  gran novela de Giuseppe Tomasi di Lampedusa:  “El Gatopardo”, como ya hiciera con un arte espectacular el maestro Luchino Visconti en 1963. En esta ocasión, Richard Warlow es el creador y guionista. Y en la dirección está el prestigioso británico Tom Shankland en colaboración con Laura Luchetti y Giusseppe Capotondi. Los actores principales son Kim Rossi Stuart, Benedetta Porcaroli, Deva Zassel y Saul Nanni. 

 

Visconti hizo una adaptación maravillosa, mítica y personalísima, que respiraba el mundo lampedusiano como si fuera propio. Y esta adaptación de Warlow, Shankland y Netflix es diferente y notable: yo la he disfrutado muy a gusto. Lampedusa, al inicio de la segunda mitad del siglo XX, escribió una novela del XIX con los ojos de la modernidad, con la melancolía de saber que tanto aquel pasado inmutable de la Sicilia del Príncipe de Salina se había venido abajo como el propio mundo del escritor. Lampedusa no consiguió publicar su novela en vida, pero, gracias al ilustre escritor Giorgio Bassani, que la prologó, llegó a las librerías en 1958. Esta nueva versión es brillante, centrada en mostrar el lado más histórico del drama familiar de los borbónicos Corbera. Está contada con brío, emoción y conocimiento, pero sin el existencialismo crepuscular de Visconti. Lampedusa enunció así su ecuación de validez general: «Si queremos que todo siga igual, es necesario que todo cambie». Esa maldición nos persiguió durante todo el siglo XX. Ahora, en el XXI, todo es más confuso. 

Kim Rossi Stuart (un tipo más alto incluso que Burt Lancaster) hace un Príncipe de Salina creíble, potente y admirable, aunque tenga la tentación de mirar de reojo a ese dios jupiterino y con los ojos azules que fue Burt Lancaster. El personaje de Concetta Corbera se agiganta en esta nueva lectura y sube al primer plano. La actriz Deva Casel hace una Angelica de belleza gótica y morbosa, lejos de la carnalidad explosiva de la Cardinale. Y Tancredi, ni siquiera prestándole la venda de su ojo al espectador, puede ser confundido con Alain Delon. Saul Nanni hace un ambicioso y sediento  trepa, que convence sin problemas. “El gatopardo” es una serie magnífica, aunque es un imposible alcanzar la belleza y poética profundidad del texto Lampedusa, que acabó su historia con esta línea existencial: “Después todo halló la paz en un montoncito de polvo lívido”.

 

LOCKERBIE:

“Lockerbie. La búsqueda de la verdad” es una serie creada y escrita por David Harrower. Podemos verla en SkyShowtime y está dirigida por Jim Loach y Otto Bardhurst. Se basa en el libro de Jim Swire y Peter Biddulph. Y Colin Firth interpreta al médico real y padre de una víctima. Jim Swire investigó el atentado del vuelo 103 de Pam Am el 21 de diciembre de 1988.

 

Una serie tremenda, contada con buen pulso. Narra un atentado en cielo escocés con un total de 270 víctimas mortales sumando pasajeros, tripulantes y vecinos de Lockerbie. Jim Swire es un padre coraje que busca verdad y justicia. La credibilidad del actorazo Colin Firth es absoluta. Solo se han emitido tres de los cinco capítulos de “Lockerbie”. Y espero que la verdad acabe resplandeciendo.

 

Frente a él, Jim Swire tuvo  un muro de opacidad que  fue horadando sin desmayo. La historia tiene muchas revueltas de procedimiento, policiales, políticas y judiciales. Esta serie dramática comienza con una catástrofe y luego  matiza el suceso  guiándose por los pasos de  Jim Swire. Una cosa sí sabemos cierta: En 2003, Gadafi aceptó la responsabilidad de Libia por el atentado de Lockerbie, y pagó más de 1.000 millones de dólares en compensación a las familias de las víctimas. Los británicos son maestros poniendo contexto y verdad en los sucesos que han conmovido a su sociedad. En eso, la ficción británica no tiene rival. Aconsejo mucho ver “Lockerbie. La búsqueda de la verdad”.

 

Nos despedimos con un hermoso cántico siciliano que reluce en la vibrante banda sonora creada por el compositor  Paolo Buonvino para la serie “El Gatopardo”.  Simona di Gregorio lo da todo con  su hermosa y extraordinaria voz en el tema “Spunta lu Suli”.  Gran simbiosis entre el folk siciliano y la música cinematográfica. 

 

 

 


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