NO DIGAS NADA – REMATCH (De Película RNE 28/12/2024)

Cosas que anoche le conté a Yolanda Flores.

 

Hay cosas que me ponen de los nervios. Por ejemplo: me marea mucho eso de que repitan en la tele los mismos cinco segundos en bucle de lo que sea. Me rayo con el bucle de un señor entrando 50 veces en el juzgado o de la riada llevándose un puente 500 veces seguidas. A la primera ya lo he entendido, y supongo que no soy el único.

 

NO DIGAS NADA:

Una serie que me ha puesto a tope. Coproducción de Estados Unidos e Irlanda, que podemos ver en Disney Plus. Está basada en el libro “No digas nada: Una historia real de crimen y memoria en Irlanda del Norte”, escrito por el periodista de investigación estadounidense Patrick Radden Keefe. Joshua Zetumer es el creador y guionista principal de esta ficción que quiere contar hechos reales, complejos y turbadores. Los actores principales son Lola Petticrew, Hazel Doupe, Maxine Peake o Josh Finan.

 

“No digas nada” me ha dado la vuelta a la cabeza. El conflicto en su forma violenta y despiadada comenzó en Irlanda del Norte a finales de los años sesenta y se prolongó hasta el Acuerdo de Viernes Santo en 1998. “No digas nada” nos cuenta la historia de Dolours y Marian Price, dos hermanas que militaban en el IRA. El IRA no aceptaba mujeres para la lucha armada y estas dos chicas consiguieron cambiar ese paradigma con intuición estratégica y atracando bancos disfrazadas de monjas. Hasta ese momento las mujeres escondían armas, vendaban a los heridos y servían el té. El padre de Dolours y Marian se jacta del tiempo que ha pasado en la cárcel por la causa. En la familia Price hay una tía que perdió la vista y las manos en un accidente con explosivos. Las chicas crecieron en ese ambiente tan saturado de heridas y de ira. Los nueve capítulos de esta serie acaban con un letrero que dice: "Gerry Adams siempre ha negado ser miembro del IRA o participar en cualquier violencia relacionada con el IRA". Pero las imágenes cuentan algo muy distinto. 

 

“No digas nada” habla de la ley del silencio y me ha conmovido mucho. El relato de los hechos, por ficcionado que esté, me parece verosímil. El IRA es un sitio del que huir, y esta serie retrata muy bien el ambiente de amenaza constante, de obediencia ciega y de mitos apretando el gatillo.  La violencia es siempre un mal camino. Ese es mi pensamiento. Soy así de hippy. ¡Que le vamos a hacer! El gran mérito de “No digas nada” está en el retrato interior tan realista sobre cosas de las que mejor era no hablar si estimabas tu estancia en la tierra. “No digas nada” es un thriller que  hace pensar, y eso es ya una gran victoria. Romantizar la violencia es malo para el cuerpo y para el alma. Y sí, después de ver “No digas nada” digo que Gerry Adams me parece un mal bicho. Y seamos justos: Lo que estaba frente a los católicos irlandeses también era un mal bicho. Los actores están de fábula. Y me gustaría que “No digas nada” diera mucho que hablar.

 

REMATCH:

Serie francesa que podemos ver en la plataforma Max. Sus creadores son Yan England, Bruno Nahon y André Gulluni. El canadiense  Yan England -en otras lides actor-  dirige los seis episodios. A Garry Kaspárov lo interpreta el británico Christian Cooke, que tiene de compañeros a Sarah Bolger, Trine Dyrholm y Aidan Quinn. El ajedrez -un juego tan cerebral- suele quedar bien tanto en el cine como en la tele.

 

Más que el ajedrez, lo que queda bien en la ficción son los ajedrecistas: gente que echa chispas por la cabeza. IBM construyó el superordenador Deep Blue como máquina de jugar al ajedrez y la enfrentó en 1997 al gran maestro momento: el campeón del ruso-soviético Garry Kaspárov, que venció a la máquina. IBM ofreció la revancha a Kaspárov, que aceptó. No cuento que sucedió en ese segundo combate, porque los no aficionados al ajedrez tal vez no lo sepan, pero ese es el tema principal de esta serie. Kaspárov,  por cierto, viajaba con su madre Klara Kasparova como solían hacer nuestras folklóricas, y Kasparova era la jefa del equipo. Los ajedrecistas, más aún los grandes maestros, son una mezcla de samurái con matemático loco. Verlos en acción es todo un espectáculo, y esa emoción es la que captura con acierto la serie “Revancha”, porque aunque no sepas nada de ajedrez si quedarás satisfecho con el juego humano de Kaspárov. Esa trama se entiende muy bien, tanto como se entienden las películas de artes marciales o bélicas sin necesidad de haberle dado nunca una colleja a nadie. “Revancha” tiene mucha intriga y es muy entretenida.

 

Nos despedimos con el grandísimo Kris Kristofferson, que en la serie “No digas nada” nos mete la mano por debajo de la falda cuando canta suavecito y  a la oreja esta declaración de amor: “Amarla fue más fácil (que cualquier cosa que vuelva a hacer)”. Kris Kristofferson, siempre en el corazón: falleció a los 88 años el pasado mes de septiembre. Gracias, Kris.